Hace ya un par de noches,
que amenaza mi cama,
me dice que no voy a descansar,
-y es de las que lo cumple-
que amenaza mi cama,
me dice que no voy a descansar,
-y es de las que lo cumple-
hace ya un par de vidas,
que le ha dado por extrañarte,
y susurrarme cuando me acuesto
que echa de menos tus caderas,
aunque yo no te recuerdo.
que le ha dado por extrañarte,
y susurrarme cuando me acuesto
que echa de menos tus caderas,
aunque yo no te recuerdo.
Me obliga, la muy osada,
a ver esa marca en la pared,
y me repite con ganas,
que no duermo igual sinoestastú
a ver esa marca en la pared,
y me repite con ganas,
que no duermo igual sinoestastú
y mi cabeza, que se niega,
otra que está empecinada,
que dice que te ha olvidado
y nunca olvida casi nada.
otra que está empecinada,
que dice que te ha olvidado
y nunca olvida casi nada.
Y yo, aquí en medio,
sufro el acoso de ambas,
pero no me excuso,
me he perdido con ganas
sufro el acoso de ambas,
pero no me excuso,
me he perdido con ganas
y aunque algo tarde,
aprendo que tus sustitutos
-o al menos los que he encontrado-
siguen sin tener tus ojos.
aprendo que tus sustitutos
-o al menos los que he encontrado-
siguen sin tener tus ojos.