miércoles, 23 de noviembre de 2011

A kilométricas micras.

Darlo todo -comosinohubieramañana-
matizar cada sonrisa,
y barnizarla color alegría
(es que también hay sonrisas tristes, por crudo que parezca),
y vivir, sobre-vivir al asfalto y las faltas,
crecer, retroceder-avanzar y cambiar:
moldearse y amoldarse a la vida.
Y acordarse, y re-acordarse
-no sólo recordar, sino hacerlo muchas veces-
de cada detalle -barra- movimiento -barra- sensación;
esperando CON TODO que se repita y...
punto, pero seguido. Sin finales
precipitados, o, sin finales a secas -
A veces digo mucho y, y, y, y...¿lo has notado?
no es polisíndeton, es 'polinseguridad';
a veces hablo mucho, pero no digo nada,
y otras, cuando callo, casi te cuento mi vida...¿lo has notado?
Me gustaría poder responderme,
todas las veces que te pregunto:
es mayéutica. Pero ni me encuentras,
ni yo encuentro el reminiscente
que me haga parte de tu verdad.
A veces teorizo absurdamente;
me martirizo, lo has notado.
Pero aún me queda fe,
confío en que avanzamos,
en que sonreír no hace daño,
¡la felicidad está a un par de micras de tus dedos!
-un par de dos, que no canario-
y somos dos, tú y yo, para alcanzarla ¿quieres?
Darlo todo -comosinohubieramañana-
es lo que hago últimamente,
y creo que me sienta bien, sí.
Quizá no sea muy ortodoxo,
pero, para lo oficial,
siempre me quedará el yoga.